Aseguran que el ingreso violento del sindicalista a un establecimiento escolar violó todos los protocolos sanitarios vigentes y atentó directamente contra la salud de alumnos y alumnas menores de edad, padres, madres y personal docente que se encontraban presentes.
La denuncia penal contra el secretario general de UPCN, Juan Carlos Scalesi, y el resto de los manifestantes de ese gremio señala que se incumplieron todos los protocolos sanitarios, se provocó un riesgo de incendio por el uso de bengalas y se causaron momentos de tensión y temor entre los presentes, especialmente los alumnos de segundo grado que esperaban recibir sus tablets del programa “A Rodar Escuela”.
El escrito detalla que “no se trató de una protesta más contra alguna medida o disconformidad del Gobierno Provincial” sino que fue “un acto de violencia que afectó de manera directa la salud, derecho a la educación, y la integridad de los alumnos y alumnas, todos ellos niños y niñas menores de 12 años, que se encontraban en la escuela”.
Además, atentó “contra la salud del personal del establecimiento educativo y familias” ya que “se han incumplido normas nacionales y provinciales por no respetar el distanciamiento, ni el correcto uso de tapabocas, ni los protocolos de actividades vigentes (en este caso de uso de establecimientos educativos)”.
También se menciona que al momento de ingresar, los manifestantes encendieron “varias bengalas”, generando un riesgo de incendio que puso en peligro la vida de toda la comunidad educativa.