El presidente Alberto Fernández se comprometió ante 12 mandatarios provinciales a resolver de “inmediato” los problemas de infraestructura hospitalaria y enviar atención médica al interior para contener los rebrotes de coronavirus.
A lo largo de una videoconferencia que compartió con gobernadores oficialistas y opositores para definir la nueva etapa de la cuarentena, el jefe de Estado escuchó un panorama desolador y preocupante de varios mandatarios por los casos de contagios comunitarios que se registraron en aumento en los últimos días.
La videoconferencia se limitó a los 12 gobernadores que están con casos de contagios comunitarios y han elevado sus cifras de en estos días. El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, y el jefe del gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, no estuvieron porque ya hablaron antes con el jefe de Estado para definir la nueva etapa de cuarentena en el AMBA.
Si bien Alberto Fernández destacó que en el AMBA hay “cierta estabilización” y un amesetamiento elevado de la curva, e incluso se mostró dispuesto a que la Ciudad de Buenos Aires flexibilice la nueva etapa de cuarentena, no fue la misma impresión que cosechó de los testimonios del interior del país.
Con dos días consecutivos con más de 10 mil casos -muchos se registraron en gran medida en las provincias del interior- y un informe del Ministerio de Salud que alerta sobre una ocupación de camas de entre un 60 y 65%, el Presidente instó a su equipo a dar una solución inmediata desde el Estado a las provincias que están desbordadas de casos de contagio comunitario que son al menos 18 hasta ahora.
FUENTE: INFOBAE
